Pérdida auditiva, vértigo (sensación de dar vueltas), acúfenos y congestión. Los trastornos que afectan al oído interno suelen ir acompañados de estos síntomas.
Sus causas pueden ser variadas: hay lesiones provocadas por infecciones, otras que tienen su origen en traumatismos e incluso algunas que han aparecido como fruto de los efectos secundarios de ciertos fármacos. Otras veces, sin embargo, la causa es desconocida. En las siguientes líneas vamos a hablarte de las patologías del oído interno más frecuentes:
Índice del artículo
Enfermedad de Ménière
De causa desconocida, el Síndrome de Ménière se caracteriza por manifestarse a través de ataques recurrentes de vértigo incapacitante, pérdida auditiva y acúfenos o tinnitus (constantes o intermitentes). Además, a menudo ocasiona náuseas y vómitos que pueden durar entre 3 y 24 horas hasta que comienzan a remitir gradualmente. Se trata de una enfermedad que afecta a un solo oído en la mayoría de las personas que la sufren y a los dos en un porcentaje de entre un 10 y 15 %.
La persona que sufre la enfermedad de Ménière acostumbra a sentir presión o una especie de tapón en el oído afectado, y aunque la audición en éste tiende a fluctuar, lo cierto es que su progresión a lo largo de los años suele ir a más. Existe, sin embargo, un tipo de esta enfermedad en el que la pérdida auditiva y los acúfenos preceden al primer ataque de vértigo en meses o incluso años. En este caso, una vez que comienzan los ataques de vértigo, la audición puede mejorar.
Neuronitis vestibular
Este trastorno se caracteriza por manifestarse con un intenso y repentino ataque de vértigo, el cual, a su vez, es causado por la inflamación de los nervios conectados a los canales semicirculares. Puede presentarse como un ataque aislado o bien como una serie de crisis a lo largo de 12 a 18 meses. A partir del primer ataque, el más fuerte y grave, acompañado de náuseas y vómitos, las crisis se vuelven más breves y, por lo general, menos intensas. En la neuronitis vestibular, a diferencia de la enfermedad de Ménière, la capacidad auditiva no se afectada.
Vértigo postular
Provocado por ciertas posturas en las que se ve implicada la cabeza, el vértigo postural es un vértigo violento que dura menos de 30 segundos. Este tipo de vértigo puede estar causado por una lesión en el oído interno, por una otitis media, una cirugía de oído o un bloqueo de la arteria que llega al oído interno, que a su vez provocan un daño en los canales semicirculares (la parte del oído interna implicada en el equilibrio).
En esta condición, el vértigo suele aparecer cuando la persona se apoya sobre un oído o inclina la cabeza hacia atrás para mirar hacia arriba. Por suerte, el vértigo postular suele remitir tras algunas semanas o meses, pero puede reaparecer en cualquier momento meses o años después.
Pérdida auditiva causada por el ruido
La exposición a ruidos muy fuertes puede causar una pérdida de audición como consecuencia de la destrucción de receptores auditivos del oído interno. Otras causas relacionadas comunes son el uso de cascos para escuchar música a un volumen elevado y el hecho de estar cerca de altavoces en conciertos o discotecas. Este tipo de pérdida de audición es permanente y suele ir acompañada de acúfenos. En este sentido, hay que recordar que cualquier ruido que supere los 85 decibelios es perjudicial para nuestra salud auditiva y puede causar daños auditivos.
Lesión del oído provocada por medicamentos
Ciertos antibióticos, diuréticos, la aspirina y sustancias similares a la aspirina pueden provocar daño en el oído interno, llegando a afectar tanto a la audición como al equilibrio.
Aunque la mayoría de los medicamentos son eliminados del cuerpo a través de los riñones, cualquier deterioro en el funcionamiento renal incrementa las posibilidades de que los fármacos se acumulen en la sangre y alcancen concentraciones que pueden causar lesiones en el oído interno.
Hidropesía del oído
Causas y factores de riesgo de la hidropesía del oído
Puede tener diversas causas, pero una de las más comunes es la enfermedad de Ménière, una condición crónica del oído interno. Las causas y factores de riesgo incluyen:- Enfermedad de Ménière: Esta enfermedad afecta al equilibrio de líquidos en el oído interno, lo que puede resultar en la acumulación de líquido y la distensión de la cóclea.
- Infecciones del oído: Las infecciones crónicas o graves del oído pueden dañar la cóclea y provocar hidropesía.
- Trauma acústico: La exposición continua a ruidos fuertes o traumas acústicos pueden dañar las estructuras del oído interno y contribuir a la hidropesía.
- Cambios en la presión del oído interno: Alteraciones en la presión del oído, como las que se producen durante vuelos o buceo, pueden desencadenar episodios de hidropesía del oído.
- Factores genéticos: Algunas personas pueden tener una predisposición genética a desarrollar hidropesía del oído.
Síntomas y efectos de la hidropesía del oído
Sus síntomas pueden ser debilitantes y afectar significativamente la calidad de vida de una persona. Los síntomas y efectos más comunes incluyen:- Pérdida de audición: La acumulación de líquido en la cóclea afecta la transmisión de sonidos al nervio auditivo, lo que conduce a una pérdida de audición gradual.
- Vértigo: Las personas con hidropesía del oído pueden experimentar episodios intensos de vértigo, que incluyen mareos, náuseas y pérdida de equilibrio.
- Zumbido en los oídos (tinnitus): El tinnitus o acúfeno es un síntoma común y puede variar en intensidad desde un zumbido leve hasta un ruido constante y perturbador en el oído.
- Sensación de presión: Algunas personas describen una sensación de presión o plenitud en el oído afectado.
Tratamiento de la hidropesía del oído
El tratamiento está diseñado para aliviar los síntomas y prevenir futuros episodios. Algunas opciones de tratamiento incluyen:- Medicamentos: Se pueden recetar medicamentos para controlar los síntomas, como diuréticos para reducir la acumulación de líquido o medicamentos para el vértigo.
- Terapia de rehabilitación vestibular: Esta terapia puede ayudar a mejorar el equilibrio y reducir los episodios de vértigo.
- Cirugía: En casos graves o resistentes a otros tratamientos, se puede considerar la cirugía para drenar el líquido acumulado o para descomprimir la cóclea.
Prevención de la hidropesía del oído
Prevenirla puede ser un desafío, ya que algunas de las causas, como la enfermedad de Ménière, pueden ser difíciles de prevenir por completo. Sin embargo, algunas medidas pueden ayudar a reducir el riesgo o la gravedad de los síntomas.- Protección auditiva: Evitar la exposición prolongada a ruidos fuertes o usar protección auditiva, como tapones para los oídos, en entornos ruidosos, puede ayudar a prevenir el trauma acústico.
- Gestión del estrés: El estrés puede desencadenar episodios de hidropesía del oído en algunas personas, por lo que aprender técnicas de manejo del estrés puede ser beneficioso.
- Seguir las recomendaciones médicas: Si se ha diagnosticado la enfermedad de Ménière u otra afección relacionada con la hidropesía del oído, seguir las indicaciones y el tratamiento recetado por un médico puede ayudar a controlar los síntomas y prevenir episodios futuros.
Otras lesiones auditivas
Además de las causas mencionadas en líneas anteriores, existen otro tipo de lesiones que afectan al oído interno, como son los tumores del nervio auditivo, que son tumores benignos que se originan en las células de Schwann y provocan pérdida de audición, acúfenos, mareo y falta de equilibrio, o la pérdida de audición relacionada con la edad, fruto del envejecimiento normal.
Sea cual sea la lesión que te afecta, en Ototech podemos ayudarte con tu pérdida de audición. No dudes en pedir cita o contactarnos sin compromiso.
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