Los pacientes que sufren acúfenos no disfrutan de una vida tranquila. El continuo zumbido puede provocar angustia, estrés, ansiedad, insomnio e incluso afectar seriamente su estado mental.
Vivir con acúfenos de una forma más llevadera es posible. Existen recomendaciones y pautas que pueden ponerse en práctica para minimizar sus efectos negativos:
Índice del artículo
Descansar adecuadamente
El descanso adecuado es vital para estas dolencias, tener la cabeza apoyada en posición elevada disminuye la presión cervical y se consigue que el tinnitus se aprecie menos.
Practicar técnicas de relajación antes de acostarse para disminuir el estrés también alivia el sistema auditivo. El estrés aumenta la presión sanguínea, y ello conduce a un incremento del sonido en los oídos cuando se tiene este problema.
Música
En este caso, se puede optar por tener música tranquila de fondo, a un volumen lo suficientemente bajo como para dejar de percibir el ruido cuando se está en casa, por ejemplo. Hay quien lo hace con el sonido del agua, o cualquier otro que le transmita relajación.
Cuando se está en la calle, en muchas ocasiones se deja de percibir el sonido que provoca angustia. En ese momento es difícil darse cuenta del alivio, puesto que el ruido del exterior sustituye al anterior, aunque de lo que se trata es de saber sobrellevarlo en sitios cerrados y a la hora del descanso.
Existen varias formas de enmascarar los acúfenos en ambientes tranquilos. El tic tac de un reloj o un metrónomo son buenos ejemplos. Hay a quien no le gusta en circunstancias normales, sin embargo, viene bien cuando se padece de acúfenos.
Es más fácil tratar de afrontar la situación y relajarse con un sonido real que con un zumbido o un ruido que se sabe que está dentro de la cabeza, siempre presente.
Mantener una actitud positiva
Cualquier dolencia se hace más llevadera si se asume y se buscan alternativas que puedan ayudar a afrontar lo que está ocurriendo. Pero la base fundamental es mantener una actitud positiva, llevando una vida tranquila sin dejar de lado las rutinas. Vivir con acúfenos no es fácil, supone de una adaptación y de un cambio de hábitos y habrá días más complicados que otros. Sin embargo, siempre podemos poner de nuestra parte para que nos encontremos mejor y, sobre todo, no caigamos en la ansiedad, la depresión, la frustración o el aislamiento.
Existen muchas técnicas que ayudan a tener una actitud más positiva y es importante escoger la que más se adapta a nuestra situación:
- Rodearse de personas afines, que nos escuchan y comprenden. En este caso, existen mucho grupos de personas con acúfenos que suponen un gran apoyo.
- Preguntarse qué se puede aprender de la situación. La aparición de trastornos de salud puede ser el comienzo para modificar nuestros hábitos y estilo de vida a mejor.
- Ponerse metas y objetivos. No hay que dejar a un lado las expectativas y los sueños.
- No centrarse en lo negativo. Apreciar los momentos, actividades y personas que generan bienestar y felicidad.
- Pasar tiempo con uno mismo, cuidándose, conociéndose ayuda a escucha las demandas del cuerpo y la mente.
Afrontar los acúfenos
Hay que tener claro que padecer de acúfenos no es estar enfermo. Son un síntoma de que algo que no funciona correctamente, sin más. Puede ser debido a la prolongada exposición a ruidos, un trauma, mala eclosión de mandíbula o problemas internos.
Las razones son muy diversas y, por eso, es recomendable consultarlo con un especialista para que pueda diagnosticar y establecer el tratamiento más adecuado.
- Maniobra de Epley para los vértigos: ¿Cómo funciona? - 21 November, 2024
- ¿Oído con mocos? Esto es lo que debes tener en cuenta - 19 November, 2024
- Vértigo en el embarazo: ¿Cómo actuar? - 14 November, 2024