No todos los tipos de sordera se producen del mismo modo. En muchos casos, se trata de sordera adquirida, es decir, que ha sido motivada por un factor externo, como la exposición a ruidos, una enfermedad o una lesión. En otros, sin embargo, la causa es la sordera congénita, es decir, aquella que se produce y se detecta durante el embarazo o en el momento del parto. En Ototech, clínica para el tratamiento de la hipoacusia en Barcelona, queremos explicarte las características principales de esta dolencia.
¿Cuáles son las causas de la sordera congénita?
La sordera congénita puede darse por factores hereditarios o no hereditarios, incluyéndose entre estos los que se producen durante el embarazo o en el momento del parto. Puede que esta se dé en ese mismo momento o un poco después, pero siempre guarda alguna relación con la transferencia de los progenitores o una malformación durante la gestación.
Es decir, puede que la causas de la sordera, total o parcial, se deba a un factor genético. Aquí, la transferencia genética sería el motivo de la dolencia. Pero también podría deberse a que durante el embarazo o el parto se haya generado un problema que afectase al correcto desarrollo o función del oído. Estos serían algunos ejemplos:
- Casos de sordera en la familia. La genética de uno de los progenitores o de sus abuelos podría causar la sordera de sucesivas generaciones. La mutación genética, dominante o recesiva, puede heredarse.
- Enfermedades maternas durante la gestación. Entre estas podrían darse la rubéola, la sífilis o cualquier otra infección.
- Problemas en el parto. La falta de oxígeno es la causa más frecuente de los problemas que afectan a la audición del bebé.
- Parto prematuro. Un nacimiento prematuro o con bajo peso podría acarrear una pérdida de audición.
- Medicamentos durante el embarazo. Aminoglucósidos, antipalúdicos, citotóxicos e incluso diuréticos, son algunos de los medicamentos que, si se consumen durante la gestación, podrían tener un efecto negativo en la audición del bebé.
- Ictericia grave. Si la mamá sufre esta enfermedad, el conjunto auditivo del bebé podría sufrir alteraciones que desencadenen una sordera.
Los síntomas de la sordera congénita
Los síntomas de la sordera congénita suelen ser evidentes a las pocas horas o días tras el nacimiento. Las pruebas auditivas que se realizan a los recién nacidos arrojan datos sobre la capacidad para detectar los sonidos. Sin embargo, puede ocurrir que el problema se haga evidente más adelante. Siempre que sea antes de adquirir la capacidad del habla y exista una relación directa con el parto o la gestación, se clasificará como congénita.
Los síntomas más evidentes de sordera en los bebés son la falta de atención ante los estímulos sonoros y la incapacidad para detectar señales de alerta, como los ruidos estridentes. Si bien los progenitores son los que primero suelen detectar el problema, es probable que la carencia auditiva salga a la luz en las revisiones médicas.
Diagnóstico y tratamiento de la sordera congénita
Las pruebas médicas al nacer, las observaciones de los padres o las revisiones podrían desvelar un problema de audición congénito. El médico hará una valoración de las posibles causas y establecerá si se trata de una pérdida leve, moderada o grave. En base a la información que recoja, aportará una u otra solución.
En algunos casos de sordera congénita, la restauración de la audición podría depender de un tratamiento por . Este reactiva la actividad celular y permite una recuperación considerable y definitiva de la capacidad de oír. En Ototech disponemos de la terapia por ondas que ya ha dado fantásticos resultados en la mayoría de los pacientes que se han tratado con ella. Pídenos información y te ayudaremos a recuperar tu capacidad auditiva.
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