Los acúfenos en niños no suelen ser muy comunes y, en muchos casos, son difíciles de detectar. Existen ciertos patrones de comportamiento que pueden indicar que nuestro hijo está sufriendo un problema en su salud auditiva, el cual no siempre va a saber identificar. Los más pequeños suelen acostumbrarse a tenerlo, viéndolo como algo normal.
Problemas auditivos en la infancia
Detectar un problema auditivo en un niño no es tarea sencilla. Hay que tener en cuenta que cuanto más pequeños son, más complicado es para ellos expresar sus dolencias o dificultades. Por lo general, tienden a acostumbrarse a padecer una irregularidad en su audición, sobre todo si han nacido con ella. Pero esto no previene que les afecte psicológicamente y se pueda ver reflejado en su comportamiento.
Desde la hiperacusia hasta la hipoacusia en niños es perceptible. En el primer caso, sienten muy violento el ruido exterior, aún produciéndose en un volumen normal. Esta situación la pueden expresar mediante llanto, gritando o expresándose irritados. En el segundo caso, estamos ante lo opuesto a lo anterior; es una dificultad para oír cuando se les llama, no respondiendo a veces al dirigirnos a ellos.
Existen otros problemas que se pueden padecer en la infancia, como el tinnitus o acúfenos, tapones u otitis. Algunos de estos pueden darse debidos a traumatismos, deficiencias neurológicas o como secuelas de otras enfermedades.
Conociendo esta información es nuestra responsabilidad como padres llevar a consulta a nuestros hijos, con el fin de mantener una revisión periódica para el bien de su salud auditiva, especialmente durante su etapa de crecimiento.
Acúfenos en niños
Los acúfenos en niños o tinnitus, al igual que otras molestias que afectan su salud auditiva, no son fácilmente perceptibles por los adultos. Por eso, es imprescindible que observemos su conducta.
Debemos apreciar si nuestro hijo tiene problemas de concentración o le cuesta realizar sus deberes. Si, además, suele tener bruscos cambios de humor, expresando gran irritabilidad sin una causa aparente, insomnio o ansiedad es posible que esté sufriendo de acúfenos.
No esperemos que el pequeño pueda explicar con exactitud sus síntomas. Muchas veces, y más si lo han padecido desde muy temprana edad, no van a comprender tan siquiera que tienen un problema. Es por ello que se precisa un seguimiento por parte del especialista, para determinar el grado de afectación.
El tratamiento de acúfenos en la infancia
El zumbido en el oído de los niños debe ser tratado lo antes posible por el especialista. Lo primero es determinar la causa por la que aparece este síntoma. Muchas veces puede ser producido por la falta de alguna sustancia en el organismo, siendo el mejor tratamiento ciertos medicamentos, que pueden solucionar el problema fácilmente.
En otros casos, se requerirá el uso de audífonos o generadores de ruido blanco. También puede ayudar la terapia de reentrenamiento. Cada caso deberá ser estudiado por el otorrinolaringólogo para conseguir el mejor tratamiento.
Aunque podemos encontrar remedios caseros, estos deberás aplicarlos siempre bajo consejo médico, teniendo en cuenta que no a todos los pacientes les pueden ayudar los mismos métodos.
Existe la posibilidad de intervención quirúrgica, pero esta no siempre acaba con el problema, sobre todo si presenta raíces neurológicas.
Los acúfenos en niños son un problema que suelen privarles de tener una vida normal. Detectar este y otros padecimientos auditivos es posible con una atención médica preventiva, como es la revisión, incluso sin la sospecha de que pueda darse una enfermedad determinada.
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